Adrenarca prematura: Cómo cuidar a su hijo
(Premature Adrenarche: How to Care for Your Child)
La adrenarca prematura es una forma de pubertad precoz.
En los casos de adrenarca prematura, los niños comienzan a tener vello púbico y/o en las axilas cuando son muy pequeños (menos de 8 años en el caso de las niñas y menos de 9 años en los niños). En algunos casos, los niños pueden crecer en altura más rápido que otros niños de la misma edad. Es posible que el niño también presente acné y olor corporal de adulto.
La adrenarca prematura ocurre cuando las glándulas suprarrenales (glándulas que liberan hormonas y están ubicadas por encima de los riñones) comienzan a producir, a una edad precoz, más cantidad de las hormonas que normalmente desencadenan el crecimiento del vello púbico o debajo de los brazos. Sin embargo, los niños con esta afección no suelen entrar en la pubertad hasta la edad habitual y no necesitan recibir tratamiento.
En algunos casos, los profesionales del cuidado de la salud solicitan análisis de hormonas en la sangre y/o radiografías para asegurarse de que el niño no tenga una pubertad precoz completa o problemas con las glándulas suprarrenales, los testículos o los ovarios, que puedan requerir tratamiento.
Los profesional del cuidado de la salud no saben cuáles son las causas de la adrenarca prematura y, en general, esta afección no provoca problemas de salud físicos, pero suele ser más frecuente en los niños con sobrepeso. En algunos niños, puede estar relacionada con la resistencia a la insulina; un problema en el cual el cuerpo del niño no responde de manera normal a la insulina producida por el páncreas. Esto incrementa los riesgos del niño de desarrollar diabetes tipo 2, hipertensión e insuficiencia cardíaca a edad temprana. Además, en el caso de las niñas, se incrementa el riesgo de padecer el síndrome de ovario poliquístico.
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Los desodorantes pueden ayudar con el olor corporal.
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El vello no deseado se puede afeitar o depilar.
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Hable con su profesional del cuidado de la salud acerca de un plan de ejercicio físico y dieta saludable para su hijo. Esto puede ayudar a retrasar o prevenir los problemas de peso y otros trastornos asociados con la resistencia a la insulina.
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Su hijo parece crecer más deprisa que los niños de su misma edad.
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Su hija comienza a desarrollar los pechos o a menstruar.
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La voz de su hijo se vuelve más grave.
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Los testículos o el pene de su hijo aumentan de tamaño.
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Su hijo tiene piel más oscura y gruesa en los pliegues del cuerpo o a lo largo de las articulaciones de los dedos.
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Su hijo parece tener problemas emocionales.
A veces, los niños con adrenarca prematura se entristecen porque se sienten diferentes a sus amigos o son blanco de bromas. Las señales de advertencia pueden incluir bajas calificaciones, problemas en la escuela, pérdida de interés en las actividades cotidianas y depresión. Hable con el profesional del cuidado de la salud si aparecen estos problemas.