Granuloma umbilical: Cómo cuidar a su hijo
(Umbilical Granuloma: How to Care for Your Infant)
El granuloma umbilical es común en los bebés; si es necesario un tratamiento, el granuloma suele curarse sin ningún problema.


El cordón umbilical permite el flujo de sangre entre la madre y el bebé antes de que nazca el bebé. En el momento del nacimiento, el cordón se toma con una pinza y se corta, lo que deja un pequeño muñón. En las semanas posteriores al nacimiento, el muñón cae y deja la marca que denominamos "ombligo".
A veces, se desarrolla un pequeño bulto en la parte inferior del ombligo, que recibe el nombre de granuloma umbilical. Es posible verlo una vez que cae el muñón. Es rosa y suele ser más pequeño que un maní (aproximadamente entre ¼-½ pulg.) A veces, el granuloma umbilical tiene un tallo o un cabo (como un chupetín en un palillo) que se une al bulto umbilical.
En algunos casos, el granuloma umbilical se infecta y es posible que haya una supuración amarilla o blanca del ombligo y, a veces, incluso enrojecimiento alrededor del ombligo. El profesional del cuidado de la salud de su hijo le recetará un antibiótico si hay una infección.
Como algunos granulomas umbilicales desaparecen sin tratamiento, es posible que el profesional del cuidado de la salud le sugiera que observe a su hijo para ver qué ocurre. En algunos casos, el profesional del cuidado de la salud utiliza nitrato de plata (una sustancia química) para secar el granuloma. Se utiliza un palillo delgado de madera para colocar el nitrato de plata en el granuloma umbilical. En general, se seca y se cae después de dos o tres tratamientos. Si el granuloma umbilical es lo suficientemente grande o tiene un tallo o cabo, es posible que el profesional del cuidado de la salud haga un nudo en la parte inferior del granuloma, y éste se caerá solo en unas semanas. Como el granuloma umbilical no tiene nervios, estos tratamientos no son dolorosos para el bebé.

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Dé a su hijo todas los medicamentos según las indicaciones del profesional del cuidado de la salud.
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Si el profesional del cuidado de la salud le recetó antibióticos, asegúrese de darle todas los medicamentos según las indicaciones, aun cuando la infección del bebé parezca haberse ido.
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Siga las recomendaciones del profesional del cuidado de la salud para mantener limpia y seca la zona del ombligo.
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Programe todas las citas de seguimiento.

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El granuloma umbilical no ha desaparecido después de seguir las instrucciones del profesional del cuidado de la salud.
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Su bebé no puede tomar los medicamentos que le recetó el profesional del cuidado de la salud.
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Su bebé parece estar más adormecido de lo habitual o no se está alimentando bien.
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Su bebé tiene más enrojecimiento o supuración del ombligo.
